Tan sólo unos días después de conocer el nuevo récord de usuarios simultáneos de PUBG en Steam y de que la semana pasara se celebrara el primer Invitational en la Gamescom de Colonia, ayer conocimos otro interesante tanto, esta vez por parte del site de estadísticas de Steam, Steam Spy.

 

Según un tweet publicado por la cuenta oficial del site, el 55% de los compradores de PUBG son jugadores de CS:GO. Estos jugadores que normalmente jugaban un 50% más que la media, ahora están jugando un 30% menos a CS:GO, lo que parece indicar un traspaso de jugadores de CS:GO a PUBG.

 

La estadística tampoco es muy clara como para afirmar directamente que la horas que se han dejado de jugar a CS:GO se han empleado en PUBG, pueden existir diferentes factores que alteren estos resultados, aunque con el auge que está experimentando el juego parece que llegar a este conclusión es algo relativamente claro.

 

Uno de los motivos que aduce Steam Spy para esta afirmación tiene que ver con el tema de actualizaciones. PUBG se ha estado actualizando mucho más frecuentemente (aunque sus desarrolladores ya han anunciado que no habrá actualizaciones tan frecuentes hasta su lanzamiento oficial), aunque sin lugar a dudas el boom experimentado por PUBG en Twitch tiene buena culpa de este fenómeno que está por ver si será definitivo o pasajero.

 

PUBG tiene a su favor una fórmula mucho más atractiva para espectadores tanto endémicos como no endémicos, en tanto en cuanto ambos tienen mecánicas de shooter pero PUBG tiene también una marcado carácter desenfadado y  un toque más casual, aunque a nivel competitivo aun está lejos de demostrar lo que el juego de Valve.

 

Está por ver si esta tendencia se mantiene. Los fans de Valve son bastante “rencorosos” con la compañía, y al igual que castigan con duras críticas a DOTA 2  en Steam cuando la comunidad no recibe las novedades que espera, puede que estemos ante un fenómeno similar con CS:GO

 

Sea como sea, el papel de PUBG en los esports están todavía por verse pero lo que es seguro es que los mimbres con los que cuenta y el tejido que está creando suponen la base perfecta para desbancar al todopoderoso CS:GO como buque insignia de los shooters en los esports.