Riot Games ha recibido la aprobación final de los tribunales de California para seguir adelante con un acuerdo de $100M relacionado con una demanda colectiva por discriminación de género que quedó parada a finales de 2021.

Ese acuerdo entre Riot y el Departamento de Empleo y Vivienda asignaba $80M para los empleados actuales y antiguos, además de las trabajadoras contratadas afectadas, el resto se destinaría a honorarios legales y otros gastos relacionados con la demanda.

La demanda fue presentada en 2018 por las exempleadas de Riot, Melanie McCracken y Jess Negrón, además la discriminación de género se detalló por primera vez en profundidad en el informe de Kotaku. Por otro lado, en informes anteriores sobre dicho acuerdo, sugirieron que 1,500 trabajadores actuales y anteriores de Riot recibirían pagos, pero en el anuncio publicado el martes y realizado por el Departamento de Derechos Civiles de California, señaló que 1,600 empleados actuales y anteriores recibirían pagos, según el Sacramento Bee.

Según el acuerdo, Riot debe gastar aproximadamente $18M en los próximos tres años, los cuales no forman parte de esos $100M, para financiar programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI), y cubrir unos 40 puestos a tiempo completo «con miembros que trabajaron como contratistas temporales», señala el Sacramento Bee. Riot también deberá pagar a un tercer experto en DEI durante los próximos tres años para que supervise y analice sus progresos en la creación de una plantilla diversa y justa.