Este pasado mes de julio tuvimos la fortuna de poder disfrutar de nuevo de DreamHack Valencia tras tres años en los que la pandemia nos apeó de este fabuloso evento. En su momento lo dijimos. Gran vuelta y gran trabajo del equipo de Encom, porque recuperar la normalidad no era fácil y se está viendo en todos los eventos con varias iteraciones a lo largo del año. Fue un buen punto de re-enganche, pero faltó un pelín para recuperar 100% la esencia DreamHack.

La buena noticia tras esta DreamHack Valencia invierno es que solo han necesitado una edición más para volver a la esencia de DreamHack y recuperar el pulso interrumpido en 2019. Esta DreamHack Valencia edición invierno de 2022 ha sido espectacular. Nunca habíamos tenido una edición de invierno en Valencia y quedarse en la capital valenciana le ha sentado de maravilla.

¿Qué podemos decir de esta DreamHack Valencia? Pues que ha tenido todo lo que queríamos. De las competiciones ni hablamos porque han desbordado contenido, premios y calidad. Pero es que todo lo que había alrededor era estupendo y ha captado la atención del público.

Hemos contado con conciertos, peleas de gallos, influencers (ojito, que han estado en Valencia personalidades como Alvaro845, TheGref y muchos otros) paseándose por todo el evento. Activaciones super chulas, clubs que han vuelto a romperlo como Ramboot, cosplay…

Y a destacar en esta ocasión 3 actividades que nos han llamado la atención y que captaban mucho la atención del público: Por un lado, la posibilidad de probar Cyber Titans, el título de Litlab Games, que causó furor. Siempre lleno, todos los puestos cogidos para echar unas partidas y con reclamo al público muy interesante. Sensacional poder probar el juego español que lo va a romper y demostrar por fin que los juegos con tecnología blockchain puede tener mecánicas de juego adictivas más allá de su parte moentaria.

El ring de boxeo / MMA, una pasada. Muchísima gente pasando por allí, subiéndose a entrenar, a que les enseñaran cómo pelear. Una pasada de verdad. De hecho, había muchas actividades físicas en el evento, para que luego digan del sedentarismo de los gamer. Y la tercera en liza, que a un servidor personalmente le ha enamorado, era la activación con Valencia Basket. Esos tres contra tres de la DreamCup han sido estupendos y nos consta que a más de uno le entraban ganas de echarse unos tiritos… esperemos que para la próxima porque esto hay que repetirlo.

Sumad a todo esto lo característico de DreamHack, que ya desde el viernes no se veía un hueco libre en los diferentes escenarios, unas Esports City Talks que han sido un auténtico lujo en cuanto a panelistas, que ni más ni menos que se ha presentado al roster de LEC de Heretics que andaba por allí el sábado (más de uno que peina canas estaba sacándose fotos cual fan de no más de 18 años), el apoyo que ha habido con el tema del bono cultura, el partnership con WhiteBit que se ha notado y mucho, el acuerdo firmado entre Encom y Andorra Business… y tenéis DreamHack es su esencia. Porque de la LAN ya ni hablamos, santo y seña de la casa y las imágenes que veis demuestran que estaba hasta arriba.

Ahora si que si, podemos decir que hemos recuperado completamente la normalidad, que esta ha sido una DreamHack de las que sientan cátedra y que el listón para 2023 está MUY alto. A ver con qué nos sorprenden los chicos de Encom el año que viene. Confiamos en ellos ciegamente porque en la entrada de esta edición había un cartel gigante que rezaba «Hemos venido a jugar», y han cumplido su palabra con creces.