La industria de los deportes electrónicos en Corea del Sur está impulsando un cambio importante en las leyes de apuestas del país, con propuestas para que los legisladores aprueben un sistema llamado “Esports Toto”, que permitiría apuestas reguladas de tipo tote (pooled betting) en partidos profesionales de esports.

Esta propuesta, promovida por la Asociación Coreana de e-Sports (KeSPA), llega en un momento en el que el ecosistema coreano de esports sigue en auge y busca nuevas vías de financiación para sostener su crecimiento.

Apuestas deportivas en Corea del Sur

Las apuestas deportivas están fuertemente reguladas en Corea del Sur. La única opción legal para la mayoría de ciudadanos es el sistema Sports Toto, gestionado por el gobierno, y que cubre disciplinas como fútbol, béisbol, voleibol, golf y baloncesto. Los mayores de 20 años pueden comprar boletos en tiendas de conveniencia, con un tope de ₩100.000 KRW (aprox. 54 €) por boleto. El sistema agrupa las apuestas y reparte premios entre quienes acierten más resultados.

A pesar de la enorme popularidad de los esports en Corea, estos siguen excluidos del Sports Toto. Anteriores intentos de introducir apuestas en esports fueron rechazados en 2024, debido a preocupaciones por el juego juvenil y los riesgos sociales asociados.

¿Un nuevo contexto político?

Sin embargo, ahora se está presionando al Partido Democrático, que actualmente ostenta mayoría en la Asamblea Nacional y lidera las encuestas presidenciales, para reconsiderar la postura.

Este partido ha hecho promesas a favor del sector IT, y figuras del sector creen que podría ser el momento adecuado para impulsar el cambio.

Según el medio Inven, KeSPA sostiene que los esports ya cumplen con los criterios de “deporte profesional moderno”, al contar con ligas globales y estructuras de clubes. La propuesta incluye un lanzamiento gradual, comenzando con un proyecto piloto controlado en ciertos partidos de ligas profesionales. El objetivo es generar una fuente de financiación estable, atraer inversión pública y aumentar la competitividad internacional de los equipos coreanos.

Barreras legales y sociales

No obstante, hay importantes obstáculos. Corea del Sur enfrenta una epidemia de ludopatía juvenil, y cualquier expansión de las apuestas legales requeriría modificar el Decreto de Aplicación de la Ley de Derechos de Votación para la Promoción del Deporte.

Además, los legisladores temen el impacto social, dadas las normas culturales coreanas centradas en la disciplina y el juego responsable.

Pese a las restricciones legales, las apuestas en esports ya existen en Corea a través de plataformas extranjeras, con crecimiento sostenido y una creciente demanda de medidas como la autoexclusión o la verificación de edad.

¿Y ahora qué?

El futuro de Esports Toto es incierto. Si se aprueba, podría abrir una nueva fuente de ingresos para el sector y sentar un precedente en Asia Oriental para unas apuestas en esports reguladas.

Por ahora, el sector de los esports, los legisladores y los reguladores observan atentamente el proceso político, mientras Corea del Sur busca equilibrar el crecimiento de la industria con la responsabilidad social.