Take-Two anuncia despidos y reajustes ante retrasos en el lanzamiento de GTA 6
El recorte afecta al 5% de la plantilla, cerca de 600 empleados, además de la cancelación de varios proyectos planificados.
Take-Two, la editorial detrás de GTA 6, ha anunciado un recorte del 5% de su plantilla, afectando a cerca de 600 empleados, además de la cancelación de varios proyectos planificados. Esta noticia ha sorprendido tanto a empleados como al sector en general, especialmente después de que en febrero, el CEO de Take-Two asegurara que no había planes de despidos, a pesar de las reducciones de personal realizadas por otros grandes editores como EA, Riot Games y Microsoft desde comienzos de año.
Impacto de los despidos en el futuro de GTA 6
La noticia ha generado incertidumbre sobre el futuro de GTA 6, previsto inicialmente para 2025 y considerado uno de los lanzamientos más esperados en la historia de los videojuegos. GTA 5, su predecesor, fue un proyecto tremendamente exitoso, generando más de $8.500 millones en ingresos globales.
Aunque estos despidos no implican la cancelación de GTA 6, que se espera sea un importante generador de ingresos para Take-Two, informes de marzo de Kotaku sugieren que la fecha de lanzamiento podría aplazarse hasta 2026. Estos retrasos se atribuyen a problemas en el proceso de desarrollo, y no directamente a los despidos, aunque la reducción de personal podría complicar cualquier intento de mitigar los impactos de estos retrasos.
Reducción de espacios de oficina como parte del plan de reducción de costes de Take-Two
Adicionalmente, Take-Two está reduciendo sus instalaciones de oficinas como parte de su estrategia de reducción de costos, lo cual no será barato. El plan pretende ahorrar más de $165 millones anuales a la empresa, pero incurre en costes iniciales significativos. Se espera que Take-Two pague hasta $140 millones en cargos relacionados con la cancelación de proyectos, y entre $25 y $35 millones adicionales en paquetes de indemnización para empleados y otros costes relacionados.
Estas medidas reflejan una reestructuración significativa dentro de Take-Two, como parte de un esfuerzo más amplio por parte de la industria de videojuegos para adaptarse a los desafíos económicos y operativos actuales.
