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La Australian Football League’s Commission ha respaldado la propuesta de la AFL para introducirse en los esports. Además se ha anunciado que el club de fútbol Greater Western Sydney Giants está buscando adquirir un equipo.

 

De acuerdo con The Sydney Morning Herald, la AFL ya cuenta con el apoyo necesario de su órgano de gobierno para desarrollar una competición de esports. La AFL mencionaba que su experiencia en “gestión de deportes, políticas de integridad y gestión de competiciones» les hace estar preparados para  ayudar al desarrollo de la industria australiana de esports.

 

En mayo de este año, la AFL anunció su interés en entrar en el sector de esports, manifestando su deseo de utilizar el estadio Etihad de 53.000 localidades en Melbourne, para sus eventos. Una quincena más tarde, el club de la AFL Adelaide Crows se convirtió en el primer club de fútbol australiano en poseer un equipo de esports, adquiriendo Legacy Esports por un montante de de seis cifras aún desconocido. Ahora, parece que con el apoyo de la Comisión, se abre la veda para que más y más equipos comiencen a trabajar con el objetivo de llevar sus marcas a la próspera industria australiana de esports.

 

No obstante, entrar en el sector puede plantear ciertos problemas, y la AFL es consciente de que no ha de forzar este camino de forma antinatural. Con los esports australianos habiendo ya pasado su etapa inicial y ya asentados, la entrada de AFL puede no ser bien recibida entre algunos fans, como ya ha ocurrido en otros casos, por ejemplo, cuando la  ESPN recibió el rechazo  tanto de fans de deportes tradicionales como de la comunidad de esports cundo expandió su cobertura de esports en 2016. Desde entonces, ESPN ha anunciado que está moderando su inversión en la retransmisión de esports, un movimiento que la AFL ha estudiado seguramente mientras planean su estrategia de entrada.

 

No parece que la apuesta de la AFL se asemeje a otras acciones desesperadas que se han visto por entrar de forma tardía en los esports.  y la AFL está muy convencida de poder utilizar su experiencia como órgano de gobierno en otros deportes. Con eventos como el Intel Extreme Masters  de Sydney generando más de 1,9 millones de horas de audiencia y números récord de asistencia, el panorama de los esports en el área oceánica está en un máximo histórico y es comprensible el interés de la AFL.

 

La entrada de entidades como la AFL pueden ayudar a legitimar la escena de los esports de Australia a través de la financiación a equipos, patrocinios y el uso de estadios para eventos en vivo. La Northern Territory Racing Commission (regulador de apuestas para la región norte de Australia) si que reconoce a los esports como eventos deportivos, y McDonald’s ha realizado recientemente su primer movimiento oficial en la industria patrocinando dos eventos de Starcraft II WCS en Australia.  De hacerse correctamente, la incursión de la AFL en los esports podría venir en un momento perfecto para continuar la explosión competitiva de la región.

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