ACTUALIZACIÓN

 

Acabamos de recibir la nota de prensa que podéis ver a continuación por parte de MEDIAPRO. En ella se hace especial hincapié en la presencia de Clash Royale en la inminente Gamergy, así como de otros juegos, pero no se menciona nada de Call of Duty. Aunque esto no quiere decir nada, pero que no se mencione el juego con lo ocurrido en estos días no parece hacer presagiar nada bueno. No obstante hasta que no se haga un anuncio oficial confiamos en que la situación pueda resolverse.

 

Parece que este asunto está creando bastante polémica a diferentes niveles. Ayer también conocíamos las declaraciones de un ex-redactor de Dexerto al respecto. Preferimos dejar el enlace para que juzguéis por vosotros mismos.

 

NOTICIA ORIGINAL

 

La figura del publisher en el sector de los esports es fundamental, y lamentablemente, muchas veces sus intereses no convergen con los de otros actores. Hasta hace poco era corriente que los publishers se dedicasen a lo que saben hacer, desarrollar / vender juegos, y que toda la gestión de los esports se dejase en manos de entidades especializadas.

 

Sin embargo, parece que  empiezan a darse cuenta del poder que tienen y cada vez quieren aglutinar más aspectos de todo lo que rodea a los esports. Esta misma semana veíamos como Riot se hacía con las riendas de la producción de la LCK, relegando a las compañías que hasta ahora se dedicaba a esas facetas a meros comparsas… Y esta semana estamos viviendo una situación complicada para la LVP en España.

 

A tan sólo 1 mes de la próxima Garmergy, el torneo de CoD de la Super Liga Orange parece que podría correr peligro. Con la llegada de la nueva edición anual de WWII, el calendario de CoD se vio drásticamente afectado. No tenía sentido comenzar una nueva temporada con el lanzamiento del último juego a la vuelta de la esquina (al que por cierto parece que todos los profesionales estaban esperando por sentirse mucho más agusto con las mecánicas de la Segunda Guerra Mundial que con las del planteamiento futurista), pero los problemas no han acabado aquí.

 

Al entrar España en el circuito oficial de Call of Duty World League, parece que Activision se ha reservado para ella misma los derechos de la competición. El tema no está claro, y esto está imposibilitando que la LVP no de a conocer la situación del torneo, posibles fechas, o incluso si estará presente en Gamergy. Algunos equipos se están impacientando pero en palabras de la propia LVP:  “Esperamos dar más información en breve. Hemos hecho todo lo posible por hacer una competición de WWI. Desafortunadamente no depende de nosotros”, según Sergi Mesonero, Strategy Director de la LVP.

 

La situación no es nada fácil puesto que CoD gozaba de mucha fama en España y tan las finales de Gamergy de Junio de este año como la copa tuvieron un gran nivel y coronaron por primera vez a un único ganador de ambas competiciones, eMonkeyz, siendo sin duda uno de los títulos más importantes para la competición. De momento sólo cabe esperar y tener paciencia, ya que esta misma semana se debería de despejar el panorama y conocer en qué queda todo.

 

No obstante, y deseando que por fin se pueda resolver este entuerto y que la LVP pueda traernos la competición que todos queremos a Gamergy, no deja de ser un toque de atención ante lo que puede pasar en el sector. Con todos los cambios que están sufriendo varias ligas, sería conveniente replantearse nuevos modelos de negocio y expectivas. Se nos viene a la mente ahora mismo por ejemplo, el intento de liga tipo Champions League que recientemente ha abortado Riot en Europa, donde decidió que habría 4 localizaciones, una de ellas en Barcelona. Si la compañía decidiese gestionar ella misma es liga, ¿significaría que no daría licencias de torneos? También es cierto que existe un auténtico maremagnum de competiciones y que como en todo sector cuando es joven, tenderá a auto-regularse.

 

Vivimos un boom y un overbooking de los esports, pero en muchas ocasiones olvidamos que si las compañías cierran los servidores, adiós al sector… y eso es un riesgo muy grande para correr por ciertas compañías que dependen de las intenciones de estos publishers y de cómo decidan llevar a cabo su estrategia en los esports.