Riot Games ha anunciado que se está reenfocando en menos proyectos para avanzar hacia un futuro más sostenible. Durante estos años, Riot Games ha intentado evitar hacer recortes, aunque esta vez no se trata de apaciguar a los accionistas o de alcanzar una cifra de beneficios trimestrales, sino de una necesidad.

En los últimos años, Riot ha duplicado su plantilla y ha intentado repartir los esfuerzos entre más y más proyectos sin tener muy presente qué es lo que más necesitaban los jugadores. Por lo que los ajustes que van a realizar tienen como objetivo centrarse en las áreas que tienen un mayor impacto, al tiempo que reducen la inversión en cosas que no lo tienen.

Esto supone eliminar alrededor de 530 puestos en todo el mundo, lo que representa alrededor del 11% de la plantilla. La organización es consciente de que a muchos no sólo les importan los videojuegos a los que juegan, sino también las personas que los crean. Esta decisión no se trata sólo de cambios organizativos; afectan a personas y familias, y están haciendo todo lo posible por abordarlo con respeto y sensibilidad. Ofrecerán una indemnización a los trabajadores cuyas funciones vayan a desaparecer y no vayan a ocupar un nuevo puesto.

Su visión de futuro es innovadora y el compromiso con sus títulos principales (League of Legends, VALORANT, Teamfight Tactics y Wild Rift) es cada vez más ambicioso. Darán prioridad a estos equipos para que puedan centrarse en los contenidos, características y actualizaciones que responden directamente a lo que la comunidad le ha estado pidiendo. Además, esperan más eventos, modos y hojas de ruta a largo plazo que conduzcan a un futuro vibrante para estos juegos.

Su estrategia plantea integrarse más en los deportes electrónicos, la música y el entretenimiento. Para ellos, los esports no son sólo competición, sino también las comunidades que florecen en torno a los juegos. El entretenimiento no se limita a contar historias, sino que es una puerta de entrada a los relatos, personajes y mundos más profundos que enriquecen la experiencia de juego.

A medida que han ido creciendo, algunos de sus esfuerzos se han vuelto más aislados, y aspiran a combinar más a la perfección la jugabilidad, la excelencia competitiva y la profundidad narrativa. Ya sea el próximo éxito de K/DA, la historia que se desarrolla en Arcane, la intensidad de un TFT Open, el escalofrío único de una partida de Worlds 5 o la atmósfera eléctrica de VAL Champs, su objetivo es la calidad, el impacto y las experiencias unificadas para los jugadores de todo el mundo.

Además de los títulos, tienen en marcha proyectos que pronto estarán disponibles. Project L ha progresado mucho y están buscando más oportunidades para que se pueda probar (pronto darán más información al respecto). La segunda temporada de Arcane está prevista para noviembre de 2024. También, tienen varios proyectos cocinándose en diversas fases de I+D.

Su volumen de lanzamientos no será masivo. Quieren que todo lo que publiquen sea algo de lo que se sientan orgullosos y que se pueda compartir con los amigos. Esto requiere flexibilidad financiera para poder dedicar tiempo a hacer cosas que sean realmente fantásticas para los jugadores. Son conscientes de que seguirán fallando de vez en cuando, pero quieren que esos fallos se deban a razones correctas, no dar prioridad a cosas equivocadas o apresurar los proyectos antes de que estén listos.

Legends of Runeterra y Riot Forge

Habrá dos áreas que sufran cambios de manera inmediata: Legends of Runaterra y Riot Forge.

Mientras LoR continúa su andadura, están haciendo cambios para que el título sea sostenible. Son conscientes de que hay una comunidad apasionada que adora este juego. A pesar de los importantes logros y del papel que ha desempeñado en la construcción del mundo de Runaterra, LoR se ha enfrentado a problemas financieros desde su lanzamiento, ya que su desarrollo y mantenimiento cuestan mucho más de lo que genera. En respuesta a ello, están reduciendo su equipo y renovando la senda de los campeones. Este cambio permite al equipo experimentar más en el espacio PvE, concentrándose en el modo de juego en el que los jugadores han pasado más tiempo. El equipo de LoR tiene planeado lanzar un vídeo para las próximas semanas en el que hablarán sobre el futuro del videojuego.

Por otro lado, cerrarán Riot Forge tras el próximo lanzamiento de Bandle Tale. Forge ha sido su puente de colaboración con estudios externos para desarrollar videojuegos a menor escala en su IP. Aunque están orgullosos de lo que han creado y agradecidos con todo equipo que forma Forge, además de los socios externos que han hecho posible estos videojuegos, no consideran que este proyecto sea fundamental para su estrategia de cara al futuro. Esto no quiere decir que cierren la puerta por completo a trabajar con otros desarrolladores si surge el proyecto adecuado, pero les gustaría que fuera diferente en el futuro.

El camino que queda por recorrer

Su estrategia de cara al futuro es muy clara: centrarse en lo que mejor saben hacer y en lo que más le gusta. Todos sus esfuerzos, desde el desarrollo, hasta la narración y la competición, se centrarán en ofrecer experiencias significativas y memorables. Aunque el cambio puede traer incertidumbre, también presenta oportunidades de crecimiento e innovación.