Del Pac-Man al GTA VI. Los videojuegos ha experimentado una transformación en los últimos 40 años. Si antes era considerado un pasatiempo exclusivo para los adolescentes, hoy los datos muestran que los adultos no solo forman parte esencial de la comunidad gamer, sino que además lideran el crecimiento en consumo y gasto. Este fenómeno se refleja en cifras contundentes: en España, 22 millones de personas juegan videojuegos, dedicando de media más de 8 horas semanales, y la mayoría de estos jugadores son adultos que superan los 30 años.

El gasto promedio de los adultos en videojuegos no deja de crecer. En mercados como Estados Unidos, el desembolso de los adultos en este sector aumentó un 20% en un solo año, con una edad promedio de jugador de 33 años. Este segmento de la población no solo consume más contenido, sino que también invierte en consolas, accesorios y juegos de alto presupuesto, consolidando a los videojuegos como una de las principales fuentes de entretenimiento para adultos a nivel global.

El perfil del nuevo gamer adulto

El estereotipo del adolescente encerrado en su habitación ha quedado obsoleto. Hoy, el 65% de la población gamer mundial es adulta, con una edad media de 32 años. Muchos de estos jugadores crecieron con las primeras consolas y han mantenido o retomado el hábito de jugar como una vía de desconexión, socialización y ocio. Además, la presencia de adultos mayores de 45 años en el sector ha crecido notablemente, impulsada por la facilidad de acceso a juegos en dispositivos móviles y la nostalgia por franquicias clásicas. Estos juegos también han impulsado a otros sectores como el de jugar casinos en línea en Canadá, una propuesta que incluye cientos de juegos, desde los clásicos tragamonedas, hasta ruletas en vivo.

Los adultos no solo juegan, sino que también participan activamente en comunidades online, foros y eventos, y son los principales consumidores de títulos de gran presupuesto y de consolas de última generación. El videojuego se ha convertido en un espacio de encuentro intergeneracional, donde padres e hijos comparten partidas, y donde los adultos encuentran propuestas narrativas y mecánicas complejas que responden a sus intereses y expectativas.

El gasto en videojuegos: una tendencia al alza

El crecimiento del gasto entre adultos es uno de los motores clave del mercado. En Estados Unidos, por ejemplo, los adultos gastaron más de 43.400 millones de dólares en videojuegos en 2018, cifra que ha seguido aumentando año tras año. Este gasto no se limita a la compra de consolas y juegos, sino que abarca también suscripciones, contenido descargable y microtransacciones, reflejando una diversificación de las formas de consumo.

En España, la industria del videojuego facturó más de 2.400 millones de euros en 2024, situándose como el tercer mayor mercado europeo. El aumento del gasto se atribuye, en parte, a la mayor capacidad adquisitiva de los adultos y a la disposición a invertir en experiencias de calidad, tanto en hardware como en software.

El papel de los dispositivos móviles como puerta de entrada

El auge de los videojuegos en móviles ha sido fundamental para atraer a nuevos jugadores adultos. Aplicaciones gratuitas y juegos casuales han democratizado el acceso, permitiendo que personas de todas las edades prueben el ocio digital sin necesidad de invertir inicialmente en una consola. Esta tendencia ha servido de trampolín para que muchos adultos, tras iniciarse en el móvil, decidan dar el salto a plataformas más avanzadas como la Xbox, PlayStation 5 o la inminente Nintendo Switch 2.

El móvil se ha convertido así en la puerta de entrada al ecosistema gamer, facilitando la transición hacia consolas de sobremesa y portátiles. Además, la integración de servicios multiplataforma y la posibilidad de continuar partidas en diferentes dispositivos han contribuido a fidelizar a este nuevo público adulto.

El atractivo de las nuevas consolas: Xbox, PS5 y Nintendo Switch 2

La llegada de consolas de última generación ha generado una auténtica fiebre de consumo entre los adultos. La PlayStation 5 y la Xbox Series XS han consolidado su posición gracias a su potencia gráfica, exclusivas de alto perfil y servicios de suscripción que ofrecen acceso a extensos catálogos de juegos. Pero la gran novedad de 2025 es la Nintendo Switch 2, que saldrá a la venta el 5 de junio a un precio de 470 euros.

La Switch 2 promete mejoras técnicas notables: pantalla más grande, 120 fps, resolución 4K en modo dock, almacenamiento ampliado y retrocompatibilidad con la generación anterior. Estas características, junto con la versatilidad de uso portátil y de sobremesa, la convierten en una opción especialmente atractiva para adultos que buscan flexibilidad y calidad en su experiencia de juego.

Un mercado en expansión y que es cada vez más atractivo para las marcas

Las previsiones apuntan a que el mercado global de videojuegos alcanzará los 651.000 millones de dólares en 2034, con una tasa de crecimiento anual del 13%. Este dinamismo se debe, en gran parte, al peso creciente de los adultos en el sector, tanto en número de jugadores como en volumen de gasto. La profesionalización de los eSports, la aparición de títulos cada vez más sofisticados y la integración de tecnologías como la realidad virtual y aumentada seguirán impulsando la demanda entre el público adulto.

Como podemos apreciar, los videojuegos son un fenómeno cultural y económico transversal. Los adultos no solo son parte del presente del gaming, sino que, con su poder adquisitivo y su demanda de experiencias complejas y de calidad, están definiendo el futuro de la industria.