Unity elimina su controvertido «runtime fee» tras la reacción negativa de desarrolladores
La decisión de Unity de revertir su propuesta es un ejemplo de cómo la opinión de la comunidad puede influir en las decisiones corporativas.
Unity Technologies ha anunciado que eliminará su controvertida tarifa de ejecución («runtime fee») que había propuesto recientemente, tras una intensa reacción negativa por parte de la comunidad de desarrolladores. La compañía había planeado implementar esta nueva tarifa, que habría cobrado a los desarrolladores una cantidad por cada instalación de sus juegos, a partir de enero de 2024.
En septiembre de 2023, Unity reveló un nuevo modelo de precios que incluía una tarifa por instalación para los desarrolladores cuyos juegos superaran ciertos umbrales de ingresos y descargas. Según la propuesta, se cobraría a los desarrolladores una tarifa fija por cada instalación una vez alcanzados esos límites. Esta medida generó preocupación en la industria, ya que muchos consideraron que podría ser perjudicial para los estudios independientes y los desarrolladores pequeños.
Los desarrolladores expresaron que esta tarifa podría llevar a costos impredecibles y potencialmente arruinar a los estudios que no pudieran asumir los nuevos gastos. Además, hubo inquietud sobre cómo Unity rastrearía las instalaciones y cómo evitaría abusos, como reinstalaciones masivas para aumentar artificialmente los costos.
La comunidad de desarrolladores reaccionó rápidamente, manifestando su descontento en redes sociales, foros y otros canales. Algunos estudios amenazaron con cambiar a otros motores de juego como Unreal Engine o Godot. Ante la creciente presión, Unity emitió varios comunicados intentando aclarar y ajustar la propuesta original, pero las respuestas fueron consideradas insuficientes por muchos.
Finalmente, Unity anunció que eliminaría la tarifa de ejecución por completo. En un comunicado oficial, la compañía declaró: «Hemos escuchado a la comunidad y nos disculpamos por la confusión y el estrés que causó nuestra propuesta. Estamos comprometidos a hacer las cosas bien«.
La decisión de Unity de revertir su propuesta es un ejemplo de cómo la retroalimentación de la comunidad puede influir en las decisiones corporativas. La compañía ha prometido ser más transparente en el futuro y trabajar más estrechamente con los desarrolladores para asegurar que sus necesidades y preocupaciones sean atendidas.
Este incidente ha resaltado la importancia de la comunicación y la colaboración entre las empresas de tecnología y sus usuarios. Los desarrolladores esperan que Unity adopte un enfoque más considerado en futuras decisiones que puedan afectar significativamente a la comunidad.